Un clásico desequilibrado.

1 de agosto de 2011

Un clásico desequilibrado.


Basta con decirlo en voz alta: Argentina-Inglaterra. A estas alturas, no hace falta ni recordar a la afición todos los momentos memorables que ha producido este clásico a lo largo de la historia del fútbol. Bien es cierto que las jóvenes promesas que están a punto de disputar su segundo encuentro del Grupo F de la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA quizás no sean plenamente conscientes de todo lo que supone este partido para sus mayores, aunque no hay duda de que harán todo lo posible por salir victoriosos de este nuevo capítulo de una rivalidad eterna.

El partido
Argentina - Inglaterra, lunes 1 de agosto, Medellín, 20:00 (hora local)

El contexto
En esta nueva edición del clásico entre estos dos grandes del balón, la balanza se decanta del lado sudamericano. La Albiceleste llegó a Colombia con el cartel de favorita gracias a sus dos figuras en ciernes, Erik Lamela y Juan Iturbe, de los que se espera mucho en esta competición. Todas las expectativas creadas se confirmaron tras su primer compromiso, que terminó con una victoria por 1-0 contra México, propiciada precisamente por sus dos prodigios. Los hexacampeones mundiales de la categoría darían un paso de gigante hacia la clasificación si lograran encadenar su segundo triunfo consecutivo. Razones para el optimismo no les faltan. De hecho, el propio seleccionador, Walter Perazzo, ha declarado que los suyos van a ir a más con cada encuentro.

Una noticia que en absoluto tranquilizará a Inglaterra. Los europeos siguen infundiendo respeto a cualquier contrincante, pero, al contrario que Argentina, se han presentado en Colombia sin algunos de sus mejores elementos, que se han quedado en casa para preparar la próxima temporada de la Premier League. Puede que esa sea la explicación de su falta de resolución frente a la RDP de Corea (0-0), y del evidente bajón que experimentó su rendimiento después del descanso."Hemos formado un equipo en cuestión de semanas. Estamos empezando a trabajar", confirmó el técnico Brian Eastick. "Contra Corea del Norte introduje tres cambios, ¡pero tenía diez jugadores agotados! ".

Números que hablan
2: son las veces que se han visto las caras estos enemigos íntimos en la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA, con un balance de una victoria para Argentina (2-1 en 1997) y un empate (0-0 en 1981). Si necesitan inspiración, los ingleses no tienen que ir muy lejos para encontrarla. En octavos de final de la Copa Mundial Sub-17 de la FIFA 2011, celebrada el mes pasado, los cachorros de los Tres Leones se llevaron el gato al agua en el último enfrentamiento hasta la fecha (1-1, 4-2 PEN).

Las frases
"Hay cosas positivas del primer partido que debemos mantener, pero también muchas otras en las que tenemos que seguir trabajando. Con Argentina es verdad que existe una cierta rivalidad. Espero que podamos estar a la altura y que consigamos finalmente ganar", Matthew Phillips, delantero de Inglaterra.

"La victoria no nos quita presión porque la Argentina siempre debe ser protagonista en este tipo de torneos. Pero es cierto que siempre es importante arrancar ganando por el tema de la autoestima", Walter Perazzo, seleccionador de Argentina.

Árbitro: Walter LOPEZ (GUA)

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