La Paz no siempre es buena.

10 de octubre de 2011

La Paz no siempre es buena.



Los 3600 metros de La Paz jugarán un rol fundamental para el desempeño de la selección en le debut de las eliminatorias. En el plantel surgen las opiniones.


A Colombia lo espera La Paz y su inevitable condición climática. Los 3600 metros de la capital boliviana obligan a mirar con detenimiento cada detalle. Por momentos parece que fuera más importante el clima que la disposición del adversario. Pero es un tema infaltable y que se sabe determinará el desenvolvimiento del equipo más allá de la planificación táctica. Ya lo había advertido Leonel Álvarez cuando dijo que tomaría las precauciones que fueran necesarias para controlar en buenas proporciones los efectos de la altura del altiplano.

Algunos jugadores del plantel ya han experimentado la sensación de jugar en el Hernando Siles, incluso el mismo seleccionador nacional. Históricamente La Paz ha sido un territorio esquivo para Colombia. Cuatro son las veces que ha viajado y en ninguna ha podido traerse la victoria. En 1996 fue empate a dos tantos; en el 2000 la corrida impecable y el festejo pidiendo aire de “El Tigre” Castillo terminaron con empate a un gol. En los siguientes enfrentamientos (2003 y 2007) el combinado nacional se llevó un punto y no marcó goles.


Por ello, en esta ocasión, la consigna es acabar con el mito aplicando las experiencias y la calidad de los futbolistas. Las opiniones en torno al tema son diversas, pero todas conducen a la misma conclusión: la dificultad para jugar.

“Decir que nos vamos a adaptar a la altura es mentira. La mayoría de estos jugadores tiene la capacidad de haber jugado en la altura y saber manejar esta situación. De todas maneras la altura la vamos a sentir. Es simplemente hacer un buen partido, estar muy ordenados y trabajar mucho con el balón”, indicó el preparador físico, Elkin Sánchez.

“No es para nada agradable”, confesó Amaranto Perea, capitán designado ante la lesión de Mario Alberto Yepes. El defensor del Atlético de Madrid debutó como titular en una eliminatoria bajo el mando de Francisco Maturana, justamente en territorio paceño. Y además de sufrir las inclemencias de la brisa, vio como la selección cayó estrepitosamente, 4-0, la tarde del 10 de septiembre del 2003, con un implacable Joaquín Botero. “Es muy complicado jugar ahí cuando falta el oxígeno, cuando la pelota coge un ritmo de velocidad mucho más fuerte. No es fácil”, advirtió.

“Las veces que he estado en el banco se siente bastante”, dijo Cristian Zapata, quien también sabe cuáles pueden ser las claves para tener un mejor desempeño: “El equipo tiene que aguantar. Hay que tirar un poquito el equipo hacia atrás, ganar el balón y salir de contraataque. Ahí le podemos hacer daño a Bolivia”.

Falcao fue mucho más tajante: “Jugar allá es inhumano”.

Dorlan Pabon y James Rodríguez, elegidos para cumplir con la función de abrir y generar fútbol por los costados, se aferran a sus pocas experiencias para rendir en la mítica geografía. “Me ha ido bien (en la altura). En el Mundial (Sub 20) me sentí bien”, dice James y Dorlan anuncia que “estoy para jugar donde sea. La altura no afecta en nada”.

“He jugado en La Paz y allá me ha ido bien”, expresó Dayro Moreno. Por su parte, Robinson Zapata dice: “No es mentira, cuando uno entra a calentar se siente un ahogo. Los primeros minutos cuesta. Más que un mito es verdad”.


Otras frases

“En la altura hay que tenerla”: Giovanny Moreno.

“En México hay altura pero no es como en La Paz. En todo caso, si eso me ayuda (jugar en la altura) bienvenido sea”: Aquivaldo Mosquera.

“En la altura me ha costado jugar, pero siempre he hecho buenos partidos”: Jackson Martínez.

“La clave es que el equipo esté compacto, que se haga un trabajo sobre todo de dosificar. No podemos ni ir a buscar el partido ni tampoco meternos atrás. Es simplemente tener claro lo que se va a hacer. Son 90 minutos que se pueden hacer muy largos si el equipo no se dosifica y no sabe los que tiene que hacer”: Abel Aguilar.

“Sabemos cómo es Bolivia de local y lo que representa. La idea es ir allá y desde un principio imponer condiciones con la pelota”: Camilo Zúñiga.


Las recomendaciones médicas

El médico de la selección, Carlos Alberto Ulloa, explicó cada uno de los puntos importantes para tener en cuenta para que el equipo, desde la parte científica pueda obtener un mejor desempeño deportivo.

“La idea es llegar a la altura antes de 24 horas previo al partido, tratando de minimizar los efectos adversos que tiene la falta de oxígeno. Desde hace unos días estamos restringiendo algunos tipos de alimentos, algunas verduras, sobre todo las que hacen digestión lenta”.

“Les damos (a los jugadores) una dieta muy estricta. Mucho líquido, algunos carbohidratos simples y alguna proteína sin ningún tipo de salsas”.


Lo único que sabemos en @NoticiasMillos es que el buen futbolista juega bien en donde sea!

@NoticiasMillos

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